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¡?Porqué tan perdida?!!??

Ando muy perdida porque Mario otra vez está de viaje, y ahora no tengo portátil así que para postear tengo que estar arriba y pues, con todo lo que hay para hacer, es como difícil...

Pero se me había quedado contar como nos fue el miércoles así que aquí voy:

Tempranito llegó Mati con su acompañante, Constanza. Subimos a internet a buscar la receta para copiar los ingredientes...me pareció que una visita a la plaza de mercado, entre semana, sin tanta gente, podía ser una excelente actividad para los chicos. Leímos juntos el post de Lunática una vez más, hicimos una lista de mercadao y salimos para la plaza de Paloquemao. Allí paseamos por las hierbas para comprar las hierbas de provenza, por los vetgetales, por los quesos, las carnicerías, las fruterías. Una plaza es un paisaje de olores, sabores, en fin, es muy bello. Además la cordialidad de la gente que te ayuda, que les regala fruticas o pedacitos de cosas a los chicos, que se ofrece para cargarte las cosas, que te dan rebaja... Nunca podrá un supermercado competir con la variedad y la belleza de un espacio así.

A mi, ya todos mis vendedores me conocen y saludan a los chicos por nombre, ofreciéndonos siempre lo mejor porque somos clientes habituales...

LLegamos a la casa y entre todos hicismo el ratouille para acompañar el elmuerzo. Quedó exquisito, lleno de olores y sabores...muy nutritivo! muy colorido! delicioso!

Por la tarde fui a comprar unas cositas para recomponer unos cojines en mi casa...y luego llegaron Jan y los chicos, con Sebastian y Sandra. Teniamos un invitado común a tomar Onces:C esar. Hablamos sobre Waldorf, de ahí mi inquietud...

Insisto, me suena, pero con cautela. No me gusta la institucionalización.

Me acosté exhausta y no escribí....jajaja!

Comentarios

Anónimo dijo…
A Matías, con frecuencia, le gustan mucho las experiencias que tienen que ver con la preparación de alimentos. Visitar lugares donde hay muchos alimentos es una oportunidad bellísima de aprendizaje.
Llego muy contento por las actividades de ese día en la mañana.
Saludos y las mejores energías.
Erwin García

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