Ir al contenido principal
Hola, soy estudiante de periodismo de la UPB de Medellín y para una clase de medios electrónicos estuvimos analizando a los ganadores del premio Colombia en línea. La verdad el ganador en la categoría de blogs me genero decepción, por eso decidí visitar las páginas de todos los concursantes. Casi al inicio de la lista los encontré a ustedes, fue mi tesoro del pirata.

Yo no sé que tan buenos lectores de blogs sean ustedes, pero la verdad yo si me reconozco como toda una loser, lectora de cuanta pendejada y acierto se publica en estas bitácoras personales que me obsesionan bastantico. No tan buena bloggera, eso también se tiene que decir, no tan constante e intimista como ustedes.

Bueno, el asunto es que sólo les quería dejar un comentario porque me gusto mucho su trabajo, tal vez debería decir, su manera de registrar la vida. Continúen educando a sus hijos con tanto amor y tiempo como hasta ahora, porque las huellas que nos dejan los besos, abrazos y dedicación de nuestros padres, nunca se borran ni de la piel ni del alma.

Saludos cariñosos desde Medellín.

Carla Giraldo Duque.


Carla,

Su nota me alegra muchísimo. La verdad es super reconfortante sentir voces de solidaridad con nuestro proyecto; lo que registramos acá es un esfuerzo familiar por reconocernos, tolerarnos y querernos.

Esta nota se suponía que era un respuesta breve para los comentarios, pero me emocioné tanto con su gesto de escribirnos que copié y pegué el mensaje para que fuera un post.

Como habrá usted leído, no pretendemos ninguna meta específica diferente a la de acompañar el mayor tiempo posible a nuestros hijos. Sostenemos que en esa ruta podremos inducirlos a que se apoderen de sus vidas y que no caigan en esa horrible uniformidad que contagia a diario.

Lo que usted lee es un diario escrito por sus padres (Rosario recién ha sido incluida como autora). La "nueva tecnología" sólo añade unas características particulares en relación con la difusión de lo escrito: por un lado sería ridículo imaginar que un documento que pretenda esquivar la intromisión tecnológica como actual en aquella edad; por otro lado este proceso se ha alejado del ideal del Maestro, como fuente única e impecable de la sabiduría: los aportes, sin importar su lugar de emisión, nos son fundamentales.

Leyendo su página advierto de inmediato que le debo decir como cierre de este mensaje. Personas que se desarrollan a si mismos a través de sus quehaceres, como usted con la literatura, son nuestro ejemplo y nuestra meta. Tratamos de navegar entre individuos que contagien con sus amores personales. Invitamos a nuestros hijos a ese contagio diario, es nuestro ideal.

Gracias por leernos, no piense que es un hecho de menor cuantía,

Jorge Mario

Comentarios

Mil gracias por la respuesta y por la emoción, es compartida.
Sólo me queda decirles que los seguiré en sus diarios y registros de “ruta”, una palabra suya, que además de hermosa me parece muy sensata, pues es la “ruta” para hacer de sus hijos excelentes personitas, la que los irá moldeando como viajeros únicos.

Abrazos para todos.

Carla.

Entradas más populares de este blog

Carta a Nancy (y a tod@s los que dudan si escolarizar o no)

Hola Nancy, No te conozco sino a través de la confianza de Angélica, así que voy a escribirte como si te conociera.  Nuestra familia se desescolarizó años antes de que naciera nuestra primera hija, Rosario. Es más, una de las razones por las que me consideré "compatible" con el padre de mis hijos para crear un experimento de pareja, fue la sospecha y el desasosiego que nos producía la escolarización.  Pero...una cosa es cómo te imaginas la cotidianidad desescolarizada, y otra un poco distinta como es (todo en la vida es así no?). De todas maneras era muy claro, por muchas razones, que no queríamos darle a nuestrs hijos ni la educación elitista y blanca que no podíamos (ni queríamos) pagar de los colegios considerados "excelentes" (yo misma me gradué de uno de esos); ni la educación de obrero raso que nos ofrecía la educación pública. (Nota al margen a propósito de esto. Si esta diferencia es notoria en Bogotá, no se imaginan Cartagena. La educación pública aquí es ....

Que horror!!!!!!!!!!!!!

Tomado de El Espectador sábado, 09 de junio de 2007 En la enfermería del Colegio Nueva Granada de Bogotá, uno de los más prestantes de la ciudad, se repite la misma escena: una fila de alumnos de bachillerato aguarda con un recipiente de plástico en la mano, en el que antes han escupido, a que la enfermera deslice una tirilla de papel. Si la tirilla permanece blanca, los estudiantes suspiran y regresan tranquilos a su salón de clase. En cambio, si la tirilla se torna azul, el alumno debe someterse a un segundo examen, esta vez de orina, para descartar o confirmar definitivamente si ha consumido alcohol o cualquier otra sustancia psicoactiva. Se trata de las polémicas pruebas antidopaje que en los últimos años saltaron de las competencias atléticas a los cuerpos de policía, a las empresas y ahora irrumpen en los salones de clase. En países como Estados Unidos, México o Inglaterra esta práctica ha provocado agitadas discusiones entre quienes defienden su efectividad para poner freno...

If- Rudyard Kipling (traduccion libre al español)

If -Rudyard Kipling If you can keep your head when all about you Are losing theirs and blaming it on you, If you can trust yourself when all men doubt you, But make allowance for their doubting too; If you can wait and not be tired by waiting, Or being lied about, don’t deal in lies, Or being hated, don’t give way to hating, And yet don’t look too good, nor talk too wise: If you can dream—and not make dreams your master; If you can think—and not make thoughts your aim; If you can meet with Triumph and Disaster And treat those two impostors just the same; If you can bear to hear the truth you’ve spoken Twisted by knaves to make a trap for fools, Or watch the things you gave your life to, broken, And stoop and build ’em up with worn-out tools: If you can make one heap of all your winnings And risk it on one turn of pitch-and-toss, And lose, and start again at your beginnings And never breathe a word about your loss; If you can force your heart and nerve and sinew To serve your turn long ...