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Premio a la mujer equivocada

Ayer me enteré que recibí el premio a la Mujer Talid 2015 en Cartagena. Es un premio pequeño que busca "resaltar la labor incansable de muchas mujeres en la ciudad que luchan por cambiar la realidad de su entorno, haciendo caso a su carácter altruista y desinteresado".  El premio me lo dan el 4 de julio, pero ya sentí esa ráfaga de buena vibra con los más de 300 mensajes que he recibido como felicitación. Los agradezco inmensamente sobre todo porque muchos vienen con frases como "te lo mereces" y "eres un modelo a seguir". Esa es una responsabilidad gigantesca. GIGANTESCA. Y yo, a mi mejor estilo, quiero compartir con uds. mis contradicciones y mis dudas, para que problematicemos juntos el éxito, los logros, los temores y las dudas.

Soy una madre separada (cuasi soltera) desescolarizadora y con sueños propios de lograr usar mi talento y mi energía para mejorar lo que me rodea. Esta oración suena linda, pero es una locura antinatural, ridícula y hasta violenta. Me explico:

Sobre la fundación

Llevo 5 años trabajando para mi propia Fundación. Si me ha pagado 4 salarios, no me ha pagado más en todo ese tiempo. He logrado mantener mi casa porque a la par con FEM hago consultorías "de todas las calañas".  A veces logro trabajar poco tiempo y ganar mucho, para vivir el resto del tiempo sin remuneración. A veces no. Y tengo que trabajar por salarios pequeños en medios tiempos, para sostener la casa y la Fundación. Muchas mañanas me levanto con vértigo del futuro porque no se ni con qué pagaré el siguiente arriendo de mi casa, y mucho menos el de la oficina.

Formulo proyectos todos los días, siempre estoy pendiente de un cierre de convocatoria, de una información crítica de una fecha límite. Me como las uñas, y aplazo salir a caminar porque me levanto a las 4am y en vez de hacer ejercicio como siempre es mi plan, lo cambio por sentarme en el computador a ver cómo más hacer. Nunca me ha afectado el tamaño de mi cuerpo, pero después del chikungunya he pensado varias veces que tengo que adelgazar porque aun me duele todo.

Mas de una vez mis proyectos han sido escogidos para ser financiados por su calidad. Y cuando van a poner los recursos, aparece algún funionarillo a pedirme un 30%.  FEM lleva 4 años sin operar un solo peso del gobierno, así no se puede. No estamos dispuestos.

Sobre la innovación social

Entonces a finales del 2013 decidimos crear empresas para sostener a FEM, una agencia de viajes, y un hostal, que nos mantengan. Pero también estos tienen curva de aprendizaje, logros, errores y puntos de equilibrio. También tiene gastos de funcionamiento, inversiones iniciales. Tampoco llegan tan pronto. Ademas, en vez de ánimos recibes críticas de la gente porque ahora vas a "vender", "exotizar", "explotar". Es increíble lo satanizado que tenemos el dinero. Y quiero resaltar algo, el dinero no es el problema. El problema es la ética detrás del uso que se le da. Creo que lo mismo pasa con el poder. Ni el dinero ni el poder corrompen, creo yo, solo hacen visible lo que realmente es.

En 2014 aprendimos a hacer crowdfunding lanzando un proyecto en conjunto con una organización que luego, cuando recibió una mega donación, nos sacó por la puerta de atrás y casi sin avisarnos, aún cuando habíamos sido nosotros los que habíamos logrado darle la atención suficiente a la infraestructura. Debe ser que soy una hueva, o tal vez sea que soy de las pocas personas que confían, por que soy confiable, y "el ladrón juzga por su condición". Nos quedamos sin lugar pero con proyecto, porque la gente misma de la comunidad nos pidió que continuáramos, en casas prestadas, y en las canchas del barrio. He ahí un buen par de indicadores de legitimidad y confianza. (para ver de que se trata "Mi Casa Club", sigan este link).

Esta es la historia de la Fundación, y de la "mentalidad emprendedora" que nos ha tocado crear para poder sobrevivir. Lo lograremos, lo se, pero no es absurdo que una buena organización, con indicadores y profesionales locales e internacionales de la calidad de los nuestros, no haya podido pasar de malvivir? Qué dice eso de los proyectos "bottom up" en Colombia? Y cómo será para una organización donde la directora no sea bilingüe y no sepa formular proyectos? Es más difícil??!!! No. Es imposible. Si FEM, que es capaz de dictar conferencias internacionales en Londres, Lausana y Willemstad, de traer voluntarios de Oxford, Stanford, y varias universidades europeas, no es visible para el gobierno como un interlocutor válido, entonces quién? FEM tendría unos indicadores de impacto sobresalientes si lograra su tope de operación, pero en Colombia es preferible financiar el asistencialismo (con sus réditos electorales) que el desarrollo, y eso cansa mucho.

Ser "emprendedor" e "innovador" también es falaz. Ya no tenes el mismo tiempo para hacer consultorías, y dices, pues que "mi negocio" me mantenga con poco mientras logra punto de equilibrio. Esto quiere decir que eres el TODERO de la empresa, y te ganas...el mínimo si te va bien. Es decir, cerca de una quinta parte de los gastos de las 3 personas que componen mi casa. Las políticas de innovación acaso no entienden que trabajar con y para la base de la pirámide implican unos esfuerzos de inversión mayores? Y mientras tanto las políticas de capital semilla se llaman "nanocréditos"...imagínense, más pequeños que los microcréditos. Con ese dinero qué empresa puede crecer?

Ahora entonces me encargo de FEM, de la empresa diseñada para mantenerla (Cartagena Insider) y del nuevo proyecto que contribuya a su sostenibilidad (el hostal).... y de la educación de mis hijos.

El padre de mis hijos aporta 1/5 parte de lo que cuestan los gastos de la casa. Claro, tal vez si viviera en una ciudad más barata... Tanto él como mi madre han ofrecido alguna vez pagar el colegio de Rosario y Rodrigo, que vale más, y yo siempre me pregunto, ¿por qué no me ofrecen ese dinero para educarlos como yo quiero? Pero en fin, no voy a repetir las razones por las que no quiero que vayan a un colegio ni privado ni publico en Colombia. El punto es que la legislación en Colombia parece proteger a las mujeres, y probablemente dé a las mujeres pobres algunos beneficios (como los subsidios, la educación gratuita para ellas y los hijos), pero a mi?  A una mujer educada y de clase media como yo ERA, no se me ofrece NADA. Y por ende, ya no soy clase media, cada vez voy bajando en la estratificación. Me he mudado 7 veces en los 8 años que llevo en Cartagena, porque en esta ciudad que se gentrifica por minuto a ningún arrendador le causa agüero sacarte al año y cobrarle el doble del arriendo al siguiente. Aquí nada se regula, nada se controla, nada se supervisa, y mucho menos se castiga. Llevo 8 años viviendo aquí y detestando a los taxistas por ser tan abusivos, de los cuales no una sino VARIAS veces, alguno me ha tratado de pegar. Así o más claro?

¿Y?

Pero ...
porqué en mi momento de euforia por ser declarada heroína pública decido decir esto?

Porque sinceramente creo que no es suficiente ni con mi esfuerzo, ni con el apoyo viral (en likes y afirmaciones) de todos mis amigos. FEM necesita apoyo real, manifestado en hechos:

1. Proyectos financiados por el gobierno sin "tajada" (FEM tiene radicados 4 MGA increíbles para el plan de desarrollo del distrito, a los cuales se las hecho ya todo el lobby del mundo...pero..."como es año electoral"...)

2. Donaciones que por pequeñas que sean nos hagan posibles. En todas partes del mundo, las organizaciones como la nuestra salen adelante por el apoyo de la gente común y corriente. Nosotros tenemos un motor de donaciones recurrentes (de débito automático de la tarjeta de crédito) via Pagosonline o un sitio donde hacer donaciones cada vez que se pueda (tarjeta debito y crédito): http://femcolombia.org/donations/

3. Y Colombia necesita un debate real sobre las políticas para las mujeres y la calidad de la educación. Pero no en marchas y consignas vacuas, ni en feminismos trasnochados. Las mujeres en Colombia necesitamos hechos: capital semilla para empresas, educación sobre la crianza, colegios incluyentes y confiables, control tarifario, trabajo con conciliación laboral.

Sin su apoyo, no podemos contra la corrupción, contra la desesperanza, la desidia y el descontrol, en medio de este caos. Los exhorto a que acompañen su apoyo por mi trabajo y el de mis equipos, con acciones efectivas que nos den visibilidad y viabilidad.

No podemos seguir exaltando a las mujeres por medírsele a estos niveles de autocastigo y esfuerzo titánico. Hay que premiar a los modelos de rol, pero que sean VIABLES y repetibles. Yo, así, no soy modelo de nadie. Nadie estará dispuesto a hacer las cosas en estas condiciones. Y ese es justamente el problema. Que yo sea la excepción y no la regla es lo que nos tiene como estamos.

NOTA: Si no me quiere ayudar a mi y a FEM, búsquese una organización que le guste pero con base en dos criterios.
Criterio 1:
Si esta organización se acabara, lo que la comunidad ha recibido de ellos queda con ellos, o se pierde? Por ejemplo, si dan mercados, pues la comida se acaba y no se hizo nada; pero si enseñaron una metodología de ahorro comunitario, así la organización se vaya, la comunidad queda empoderada.

Criterio 2:
Lo que la organización hace por la comunidad crea dependencia o independencia?

Los europeos, los australianos y los norteamericanos la tienen clara. Dar es hacer posible. Por eso el crowdfunding en el mundo tiene gran éxito...pero aquí? Aquí nos falta capital social. Cambiemos ya.

Comentarios

Epitelial dijo…
Momento catártico.

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