Cuando vino Carlos me dejó un regalo. Leo despacio porque leo mucho, es decir, varios libros al tiempo me hacen leer a una velocidad lenta pero cojo lo que leo porque me siento como para leer eso. De ahi a que lea usualmente una novela, una biografía, un libro técnico y uno técnico de otra profesión diferente a la mía al tiempo. Así es, así soy.
Pues Carlos me regaló un libro que se llama "La isla de Robinson" de Antonio Uslar Pietri. Es una bigrafía novelada en una primera persona tercerizada (en serio) de Simón Rodríguez, el maestro de Bolívar, maravillosa. Es de esos libros que cuando uno termina, llora desconsoladamente.
Solo voy a trasncribir aquí algunas de las citas más prodigiosas. Léanselo por favor. Sobre todo los unschoolers.
"Menos yo. Mi Caso fue todo lo contrario." Hacía con la mano un volterera que descendía hasta caer inerte. "Yo me preparaba para grandes cosas, venía a crear un mundo y miren dónde he venido a parar. De sabio a loco, de director de la educación de un continente entero a mendigo, de consejero de Bolívar a adulador de nulidades, de creer poderlo todo a pedigüeño y hazmerreir"
"Los hombres viven juntos, Peña, pero carecen de la idea fundamental de la asociación que es pensar cada uno en todos para que todos piensen en él". Eso no lo enseñaba nadie. Lo que se aprendía en casa, en la calle o en la escuela, eran las sumisiones, las mentiras, doblar el lomo, agachar la cabeza, mirar con humildad a todos los señores que se encaraman encima. "Por eso todos viven contra todos y no hay sociedad".
La trasnformación había que ahcerla en la escuela primaria. La primera escuela es la que debe, ante todas las cosas, ocupar la atención de un gobierno liberal. Lo que importaba no era la enseñanza sino la educación, preparar a los niños para vivir útilmente en sociedad. Enseñarles a trabajar. La escuela debe ser al mismo tiempo un taller...
...No un hatajo de muchachos repitiendo a voz en cuello frases de memoria sino un aula serena donde se aprendiera lo esencial, a leer, a escribir, a contar, a conocer las leyes y los principios de la República, pero donde también funcionara el taller para aprender a hacer cosas con la madera, con el barro y con los metales. Con las manos.
Al que no sabe cualquiera lo engaña, al que no tiene cualquiera lo compra, ...los Directores de la República deben repetirse con frecuencia. Nada importa tanto como el tener Pueblo: formarlo debe ser la única ocupación de los que se apersonan por la causa social".
"No tenemos República porque no la hemos heredado y no sabemos hacerla".
Existía, en la inmensa variedad de la naturaleza, un orden oculto y había que descubrirlo. Eso era ciencia.
Más importa conocer y practicar la sociabilidad Republicana y las virtudes que saber todas las reglas de Gramática.
La libertad me es más querida que el bienestar.Tengo todavía la posibilidad de conservar mi independencia y seguir alumbrando a la América. Voy a fabricar velas.
Pues Carlos me regaló un libro que se llama "La isla de Robinson" de Antonio Uslar Pietri. Es una bigrafía novelada en una primera persona tercerizada (en serio) de Simón Rodríguez, el maestro de Bolívar, maravillosa. Es de esos libros que cuando uno termina, llora desconsoladamente.
Solo voy a trasncribir aquí algunas de las citas más prodigiosas. Léanselo por favor. Sobre todo los unschoolers.
"Menos yo. Mi Caso fue todo lo contrario." Hacía con la mano un volterera que descendía hasta caer inerte. "Yo me preparaba para grandes cosas, venía a crear un mundo y miren dónde he venido a parar. De sabio a loco, de director de la educación de un continente entero a mendigo, de consejero de Bolívar a adulador de nulidades, de creer poderlo todo a pedigüeño y hazmerreir"
"Los hombres viven juntos, Peña, pero carecen de la idea fundamental de la asociación que es pensar cada uno en todos para que todos piensen en él". Eso no lo enseñaba nadie. Lo que se aprendía en casa, en la calle o en la escuela, eran las sumisiones, las mentiras, doblar el lomo, agachar la cabeza, mirar con humildad a todos los señores que se encaraman encima. "Por eso todos viven contra todos y no hay sociedad".
La trasnformación había que ahcerla en la escuela primaria. La primera escuela es la que debe, ante todas las cosas, ocupar la atención de un gobierno liberal. Lo que importaba no era la enseñanza sino la educación, preparar a los niños para vivir útilmente en sociedad. Enseñarles a trabajar. La escuela debe ser al mismo tiempo un taller...
...No un hatajo de muchachos repitiendo a voz en cuello frases de memoria sino un aula serena donde se aprendiera lo esencial, a leer, a escribir, a contar, a conocer las leyes y los principios de la República, pero donde también funcionara el taller para aprender a hacer cosas con la madera, con el barro y con los metales. Con las manos.
Al que no sabe cualquiera lo engaña, al que no tiene cualquiera lo compra, ...los Directores de la República deben repetirse con frecuencia. Nada importa tanto como el tener Pueblo: formarlo debe ser la única ocupación de los que se apersonan por la causa social".
"No tenemos República porque no la hemos heredado y no sabemos hacerla".
Existía, en la inmensa variedad de la naturaleza, un orden oculto y había que descubrirlo. Eso era ciencia.
Más importa conocer y practicar la sociabilidad Republicana y las virtudes que saber todas las reglas de Gramática.
La libertad me es más querida que el bienestar.Tengo todavía la posibilidad de conservar mi independencia y seguir alumbrando a la América. Voy a fabricar velas.
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