Un celular es un aparato muy útil. Los hay muy sofisticados y muy básicos, pero todos son aparaticos tecnológicos muy interesantes.
Cuando a uno alguien lo llama por celular, no sabe uno donde está esa otra persona. Podría estar en un taxi, en un baño, manejando y en una conferencia, espacios todos muy diferentes. Lo que uno escoge hacer y decir al recibir una llamada "en cualquier parte" hace la diferencia para el que llama. Es el "en cualquier parte" que añade, un sentido de la inoportunidad permanente.
Cuando es oportuna la llamada del jefe? de la mamá? de la novia? En que espacio es preferible?
Que hago entonces?
Yo escojo no contestar muchas veces. Se me regaña por eso frecuentemente. Pero soy mala para la cultura que trae imbuida el aparatico. En mi mundo, es como si el novio irrumpiera en plena reunión de chismes con las amigas, o el jefe te visitara entre las sábanas. No. Simplemente no.
La otra alternativa es adoptar un tono homogéneo con todo el mundo. Eso le duele a algunos pero me permite seguir siendo práctica. Si contesto con voz de bebé mi interlocutor al frente va a estar incómodo. Lo se por que yo me he sentido muy incómoda en escenas similares.
En fin...muy práctica la tecnología, nos cambia la cultura, el modo de comportarnos...yo no me dejo convertir en una hipócrita. Es muy raro de explicar, pero así es. Añoro la epoca en la que hacias las llamadas como las hace mi abuela, sentada y pensando cada palabra, cada tono, cada número. Y hasta te los sabías de memoria.
Celular, BB, IPAD y IPOD...maravillosos devices. Pero la vida real sigue aqui.
Comentarios
Que sea una herramienta útil o una dependencia asfixiante es decisión personal... hasta donde se puede ;)
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