Nunca me he sentido mucho de ninguna parte. Miento! Me siento muy colombiana, mucho. Pero no me gustan los regionalismos tontos que nos enemistan entre hermanos. Mi mejor amiga es paisa. La conocí trabajando por Colombia, inventándonos una Medellín. De dónde era yo? De Bogotá. Y? Medellín es un poco mía. Nunca he vivido allá. No lo necesito para amar esa ciudad rota, contradictoria, hermosa, pedagógica, apostable. Mi otra mejor amiga es pastusa. Conocí Pasto hace relativamente poco tiempo, porque hace mucho la conozco. Es decir, fui por primera vez hace como 4 años. Pero soy pastusa desde siempre, con el volcán, la gente divina, el centro bellísimo, y el carnaval que aguarda que el tiempo y el bolsillo nos coincidan para ir a conocerlo en persona. Por que ya lo admiro y lo conozco en fotos, libros y experiencias de esa amiga que viene en empaque familiar y pertenece a una de las familias más saludables y bellas que conozco. Tengo varias mejores amigas aquí, en Cartagena. Una es la más....